Perfeccionar la conducta del perro hacia el entrenamiento.
Conseguir que nuestro compañero canino sea un perro educado y equilibrado, que sea obediente en la rutina de la vida diaria, mejorando
la convivencia con las personas y con otros perros, que este adaptado
y pueda desenvolverse correctamente en la ciudad, y de esa manera
este totalmente integrado en nuestra sociedad.